Los nuevos partidos toman el poder local
Por: Agencias
Madrid, España.- El gobernante Partido Popular (PP, derecha) y el opositor Partido Socialista (PSOE) sufrieron este domingo un espectacular retroceso en las elecciones europeas, marcadas por la irrupción de nuevos partidos, principalmente de izquierdas.
De los 54 eurodiputados que corresponden a España, el PP obtuvo 16, ocho menos de los que tiene actualmente, mientras que el PSOE consiguió 14, nueve menos de los logrados en los últimos comicios.
«Hemos cumplido con el objetivo que nos trazamos (de ganar), por tanto, gran satisfacción», dijo el cabeza de lista del PP, Miguel Arias Cañete.
Foto. La candidata de Ahora Madrid a la alcaldía de la capital, Manuela Carmena, ejerce su voto.
Más pesimista se mostró la cabeza de lista del PSOE, Elena Valenciano, que admitió que «nos parece un resultado duro, difícil para el Partido Socialista».
La debacle de los dos grandes partidos tradicionales españoles se plasma en el hecho de que entre los dos, por primera vez, no logran superar el 50% de los sufragios, un resultado que superó las previsiones de los sondeos que les daban un retroceso menor.
El PSOE es el principal afectado por la aparición de nuevas formaciones, principalmente a la izquierda, como Podemos, surgida de movimientos ciudadanos como el de los indignados, que logró 5 eurodiputados.
«Podemos no nació para ocupar un papel testimonial, nacimos para ir a por todas, nacimos para ganar», dijo el líder de esa formación, Pablo Iglesias, un profesor universitario de Ciencias Políticas.
«A partir de mañana trabajaremos con otros compañeros del sur de Europa para decir en el Europarlamento que no queremos ser una colonia de Alemania ni de la troika», añadió Iglesias, de 35 años, que ha alcanzado notoriedad mediática en España con sus apariciones en tertulias políticas.
Podemos, al que las encuestas auguraban un máximo de dos eurodiputados, ha sido la gran sorpresa de la noche electoral, en la que los ecocomunistas de Izquierda Plural ganaron seis eurodiputados, cuatro más de los que tenían actualmente, mientras que el pequeño partido centrista UPyD pasó de uno a cuatro escaños.
También entra en el parlamento otro pequeño partido centrista, Ciudadanos, que consigue 2 eurodiputados.
Estas formaciones parecen haber capitalizado el descontento de los españoles con las políticas de austeridad llevadas a cabo desde su llegada al poder en 2011 por el PP.
Los votantes también han mostrado su desconfianza hacia los políticos, muchos de lo cuales se han visto afectados por casos de corrupción, en un país donde el desempleo alcanza a un cuarto de la población activa y que acaba de iniciar una tímida reactivación económica.
Sin embargo, aunque tradicionalmente los españoles no se han movilizado para estas elecciones, en esta ocasión la participación ha sido superior a la registrada en los últimos comicios de 2009 con un 45,7% frente al 44,89% que se alcanzó hace cinco años.
España, que entró en la Unión Europea en 1986 y se ha beneficiado desde entonces de 300.000 millones de euros en ayudas europeas, sigue siendo esencialmente europeísta, a pesar de que la crisis y la austeridad, inspirada por Bruselas, que guía la política del actual gobierno conservador, han erosionado en parte su crédito.