BEIJING, 12 mar (Xinhua) — Estados Unidos pisoteó repetidamente los derechos humanos en otros países, causando tremendas víctimas civiles, según un informe sobre los derechos humanos de Estados Unidos dado a conocer el jueves último.

El informe, titulado «Registro de Derechos Humanos de Estados Unidos en 2016», publicado por la Ofincia de Información del Consejo de Estado de China, inidca que Estados Unidos ha organizado repetidamente fuerzas de coalición para lanzar ataques aéreos contra fuerzas militares en Irak y Siria.

Desde el 8 de agosto de 2014 hasta el 19 de diciembre de 2016, EE. UU. había lanzado 7.258 ataques aéreos en Irak y 5.828 en Siria, causando 733 incidentes con un número estimado de muertes civiles de entre 4.568 y 6.127, según el informe.

El asunto de la detención ilegal y las torturas a prisioneros de otros países siguió sin resolver. El gobierno de Estados Unidos prometió cerrar el centro de detención de la bahía de Guantánamo en 2009, pero hasta el 4 de diciembre de 2016 todavía había allí 59 detenidos, dice el documento.

Un informe desclasificado reveló que en una prisión de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en Afganistán conocida como el Pozo de Sal, el militante Gul Rahman fue puesto en una celda «extremadamente fría», le fue arrojada agua helada y al final se determinó que murió de hipotermia mientras permanecía detenido, indica el informe.

 

En un documento titulado «Descripción de Presiones Físicas», se explica cómo la CIA torturó a detenidos con métodos como bofetadas, el uso de pañales, «insectos» y «simulacros de sepelio». En noviembre de 2016, el máximo fiscal de la Corte Criminal Internacional señaló en un informe que las fuerzas armadas de EE. UU. y la CIA podrían haber cometido crímenes de guerra al torturar detenidos en Afganistán.

Según el informe, Estados Unidos continuó con sus proyectos de vigilancia internacional a gran escala. Las agencias de inteligencia de EE. UU. realizaron monitoreos a largo plazo de jefes de Estado y líderes de otros países, así como de instituciones diplomáticas y gente del común. En 2016 la CIA invirtió en empresas para minar Twitter, Facebook, Instagram y otras redes sociales. El programa de vigilancia de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, en inglés) tenía como blanco no sólo las comunicaciones domésticas sino también el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y al menos 38 países.