El dirigente católico se pronunció en esos términos en una eucaristía en memoria de los comunicadores Leónidas Martínez y Luis Manuel Medina Pérez, asesinados el 14 de febrero de este año, donde luego su matador murió de un disparo en la cabeza.
Escrito por: Iván Santana
SAN PEDRO DE MACORIS, jueves 16 de marzo 201.– El párroco de la Catedral San Pedro Apóstol Francisco Santana, llamó a las autoridades de aquí y del país, alejarse de la corrupción, ya que este sistema nos va apartando de Dios y de su ternura.
El dirigente católico se pronunció en esos términos en una eucaristía en memoria de los comunicadores Leónidas Martínez y Luis Manuel Medina Pérez, asesinados el 14 de febrero de este año, donde luego su matador murió de un disparo en la cabeza.
Participaron en la misa familiares, compañeros de trabajo y amigos de los comunicadores, entre ellos Joaquín Chea, propietario de la emisora donde ocurrió el hecho, el gobernador Luis Miguel Pichirilo y la diputada Juana Vicente.
El párroco dijo que la muerte de estos comunicadores al llegar a su primer mes, que no se quede en el olvido, sino que la sangre derramada por estas dos personas sirva para volver a reenfocar a la sociedad hacia los buenos valores, la verdad y alejarse de la corrupción.
Indicó que se hace necesario volver a los buenos valores que no se dan en las escuelas, los cuales se han perdido como son; los valores morales, ya que no tenemos una referencia moral que nos remita a Dios y, que hasta la religión la quieren quitar de los centros educativos.
Consideró que mi
entras estemos viviendo alejados de Dios, estaremos en un mundo agitado y, que hechos como el asesinato de estos comunicadores tan repugnante que marcó a la sociedad, seguirán aconteciendo en nuestro país, si nos continuamos alejando a Dios de nuestra Vida.
El párroco de la Catedral San Pedro Apóstol, Francisco Santana, lamentó que hablar de religión y de moral y cívica en las escuelas, ha quedado en el olvido.
Indicó que todas las cosas que iban enfocadas a la conducta del hombre, han desaparecido y, advirtió que si olvidamos eso y si sacamos a Dios de nuestras vidas es seguro que nos iremos al suelo.
