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Santo Domingo, sábado 25 de marzo 2023.- de Bajo el lema «Juntos por una Iberoamérica justa y sostenible», los participantes coincidieron en la necesidad de avanzar hacia la recuperación luego de la pandemia, reduciendo la desigualdad y llevando a término los compromisos de la región con la agenda global de desarrollo.
Este sábado culminó la XXVIII Cumbre Iberoamericana en la República Dominicana. Durante esta segunda y última jornada, los líderes y representantes de 22 países reiteraron la importancia de la integración y el cuidado de la democracia frente a los intereses de las potencias occidentales, que buscan sabotear la unidad.
Con el compromiso de asumir y afrontar la realidad iberoamericana, se suscribieron acuerdos sobre el medio ambiente, los principios y derechos digitales y la seguridad alimentaria, además de comunicados especiales sobre más de una decena de propuestas en el ámbito económico y social, informó la Secretaría General Iberoamericana.
Como uno de los instrumentos clave para el futuro de la región, quedó aprobada la Carta Medioambiental Iberoamericana para combatir el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, la contaminación, la degradación de los suelos y la escasez de recursos hídricos, entre otros.
Por otro lado, quedó constituida la llamada Ruta Crítica para alcanzar una Seguridad Alimentaria Incluyente y Sostenible en Iberoamérica, destinada a «evitar que se intensifique el hambre en la región y garantizar el derecho a una alimentación adecuada para todas las personas».
Con el objetivo de construir una «sociedad de la información centrada en las personas», se estipuló además la Carta Iberoamericana de Principios y Derechos en Entornos Digitales, que también busca la protección de los derechos humanos en el entorno digital.
Iberoamérica justa y sostenible
Bajo el lema «Juntos por una Iberoamérica justa y sostenible», los participantes coincidieron en la necesidad de avanzar hacia la recuperación luego de la pandemia, reduciendo la desigualdad y llevando a término los compromisos de la región con la agenda global de desarrollo. En este sentido, el presidente argentino, Alberto Fernández, criticó los esfuerzos de EE.UU. por intentar implosionar la integración latinoamericana.
«Si queremos una Iberoamérica justa y sostenible, el primer paso que debemos dar es reestablecer la unidad, una unidad que nos permita que no se prolonguen los bloqueos económicos que afectan a pueblos de la región», aseveró.
En este sentido, el ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Denis Moncada, rechazó la imposición de «medidas ilegales, coercitivas e unilaterales» sobre su nación y contra Venezuela, así como las presiones contra Bolivia y «tantos otros países hermanos». Sobre este tema también se pronunciaron la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y el canciller venezolano, Yván Gil.
Las difíciles tensiones diplomáticas que marcan la Cumbre Iberoamericana en República Dominicana
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Gil mencionó que para lograr la unidad iberoamericana es necesario abogar por el cese y erradicación de las prácticas neocoloniales, como las que ejerce Washington o la Unión Europea. El secretario general iberoamericano, Andrés Allamand, también destacó la «generación de derechos», la «creación de oportunidades» y la «incorporación de nuevos actores» como los pilares fundamentales para la consolidación de la Comunidad de países.
La cumbre culminó con una rueda de prensa encabezada por el presidente dominicano, Luis Abinader, en la que resaltó el éxito en el consenso respecto a los temas abordados y el hecho de que los 22 países que conforman la convocatoria tuvieron presencia en los actos. De igual forma, se entregó la presidencia ‘pro tempore’ a Ecuador, donde se celebrará la siguiente edición del foro regional en noviembre de 2024.
La cuestión de las Malvinas
Los participantes de la cumbre también respaldaron la reanudación del diálogo entre Argentina y el Reino Unido «a fin de encontrar una pronta solución a la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sándwich del Sur y los espacios marítimos circundantes», señaló la Cancillería argentina en un comunicado.
A principios de marzo, Argentina dio por terminada su declaración conjunta con el Reino Unido del 13 de septiembre de 2016, conocida como el pacto Foradori-Duncan. Según Buenos Aires, el pacto es incompatible con la resolución de la Asamblea General de la ONU, que recomienda a ambas partes abstenerse de tomar decisiones que impliquen cambios unilaterales en la disputa de soberanía sobre las islas.
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