La modificación al Código es auspiciado por el gobierno del PLD en contubernio con el sector patronal en perjuicio de los derechos laborales actualmente consagrados
SANTO DOMINGO.– Cientos de trabajadores marcharon desde Villa Juana hacia el Palacio Nacional en rechazo de la modificación del Código Laboral.
Los organizadores informaron que, bajo ningún concepto, aceptarán la modificación al régimen de cesantía, aumento de la jornada laboral ni disminución contra las mujeres, entre otros puntos que contempla la revisión del Código de Trabajo.
“Empresario abusador no me quite mi prestación” decía uno de los carteles levantados por cientos de trabajadores que, a propósito del Día Internacional de Trabajo, marcharon hacia el Palacio Nacional en protesta contra un intento de “contrarreforma” del Código de Trabajo que catalogan como la peor amenaza que han sufrido los asalariados dominicanos en toda la historia.
Y con el fin de demostrar que no cederán ante las intensiones de modificación del régimen de cesantía, la cantidad de horas semanales de trabajo o el tratamiento de la mujer empleada; los miembros de las principales organizaciones sindicales marcharon desde Villa Juana hasta la casa de gobierno con un manifiesto lleno de demandas de protección y reivindicaciones.
La marcha estuvo organizada por 11 gremios que representaron a los trabajadores de Santo Domingo, Sureste y Suroeste del país. Entre ellas, el Consejo Nacional de Unidad Sindical (CNUS), la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), la Confederación Nacional de Trabajadores Dominicanos (CNTD), y la Asociación Dominicana de Profesores (ADP). Simultáneamente, las organizaciones del Cibao realizaron otra marcha en Santiago, informaron los manifestantes de la capital.
A su llegada al Palacio, una comisión de ocho representantes fue recibida. Entre ellos, Rafael Abreu, Gabriel del Río, Jacobo Ramos y Eduardo Hidalgo.
Resumieron su protesta al Ejecutivo en cinco puntos. “Entre las propuesta perjudiciales señalamos: que la jornada semanal de trabajo sea de 48 horas y que la jornada diaria pueda ser de 12 horas”. También rechazaron la posibilidad del despido de embarazadas bajo mutuo consentimiento, que se establezca un tope de tres años para la cesantía, o ampliar el período de prueba para trabajadores nuevos. Pidieron, además, que las indemnizaciones se limiten a la cesantía, preaviso omitido y asistencia económica.
La marcha fue organizada por las principales centrales sindicales de la República Dominicana y fue respaldada por decenas de organizaciones de trabajadores de Santo Domingo y las regiones suroeste y sureste.
Rafael Abreu, presidente del Consejo Nacional de Unidad Sindical (CNUS), dijo que «esta manifestación es un mensaje al sector empresarial, para que sepan que la contrarreforma del Código no será aceptada en ningún sentido”.
También denunció el lanzamiento de una campaña “sutil” por parte del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), con el fin de transmitir ideas erróneas a la población y desviar su atención con otros temas, como el estudio sobre la informalidad laboral publicado este miércoles en los medios.
Afirmó, asimismo, que la creación de empleos no es una competencia del Código de Trabajo, sino de la implementación de un modelo económico adecuado.