Protestan declaraciones del Ministro de Cultura
SAN PEDRO DE MACORIS. Con motivo de las festividades de Navidad los coros
Gabriel del Castillo, de esta ciudad, y Nacional de Santo Domingo, realizaron en la noche de este sábado un concierto donde interpretaron conocidos temas navideños.
La actividad tuvo lugar en el salón Francisco Comarazamy del Ayuntamiento petromacorisano, al mismo fue respaldado por un gran público amante de la cultura y las tradiciones navideña.
El primero en actuar fue el Coro Gabriel del Castillo, de esta ciudad, dirigido por el maestro Rubén Ventura Marte.
El grupo coral interpretó varias piezas musicales alusivas a la temporada Navideña.
A seguidas entró en acción el Coro Nacional, dirigido por el maestro Simón Cesar Nova, que al igual que el coro local interpretó temas navideños. Recientemente el Coro Nacional cumplió 60 años de labor ininterrumpida.
En la actuación final se unieron ambos coros para interpretar la conocida pieza musical Aleluya.
PROTESTA
En medio de la actividad los integrantes del Coro Nacional explicaron que colocaron una cinta negra en sus vestuarios como señal de luto por los pronunciamientos del ministro de Cultura, José Antonio Aybar, de quienes se consideraron vejados y maltratados.
Explicaron que el funcionario ha incurrido en una desconsideración al considerar a esa entidad como un «cementerio de voces caídas».
Consideraron que las cifras sobre el costo de esa entidad son exageradas, ya que son muy inferiores a las que dice el funcionario.
Lamentaron que éste haya decidido formar un coro paralelo, indicando que el Coro Nacional tiene la suficiente calidad para representar coralmente al país y no es necesario crear otra entidad, pagándole más dinero que a los actuales.
De su lado, el gobernador Félix de los Santos tomó un turno en medio de la actividad para solidarizarse con el Coro Nacional, indicando que este lunes llevará la queja de éstos ante el Presidente Danilo Medina.
En días pasados, el ministro de Cultura, José Antonio Rodríguez calificó al Coro Nacional como un “cementerio de voces caídas”, por lo que éstos han reaccionado de esa manera