SAN JUAN, Puerto Rico (EFE).- Puerto Rico perdió más del 9% de sus habitantes desde 2004, reducción poblacional relacionada con una crisis económica y de falta de liquidez que amenaza con un impago a los acreedores de una deuda de 72.000 millones de dólares.
El catedrático de Economía de la Universidad de Puerto Rico José Alameda dijo hoy a Efe que la emigración de más de 350.000 personas durante ese periodo de 11 años responde principalmente a la crisis estructural que sufre la isla caribeña, aunque pueden influir también otros factores.
Las palabras de Alameda, uno de los economistas más respetados en la isla, llegan después de que el martes el Instituto de Estadísticas de Puerto Rico publicara los más recientes datos del Censo de Estados Unidos, información que señala que entre julio de 2004 y el mismo mes de 2015 se redujo un 9,2 % la población, hasta los actuales 3,4 millones.
“Lo peor de todo es que la gente se va en plena edad laboral”, dijo el economista, tras matizar que un estudio propio referido a los últimos años señala que la franja de edad entre los 28 y 32 años es la que se ha visto más afectada por la emigración rumbo a Estados Unidos.
“Otro dato desalentador es que un 66 % del empleo que se pierde en Puerto Rico se debe a empresas que cierran sus puertas”, destacó el economista, para quien es evidente que las personas se ven obligadas entonces a buscar trabajo donde existe oferta de empleo.
La falta de empleo es por tanto, dijo, la principal causa de que durante los pasados 11 años se haya registrado una reducción promedio de población de un 0,8 % cada 12 meses.
“La emigración, que afecta a gente en edad productiva, provoca también que menos gente consuma y aporte a la economía“, subrayó el catedrático, para quien durante los últimos años Puerto Rico se dirige hacia un escenario de baja productividad y a la vez alto nivel de consumo.
La relación entre la emigración y la crisis económica ha sido apuntada durante los últimos años por varios especialistas que destacan como una influye en la otra, ya que la falta de empleo provoca la salida en busca de oportunidades, lo que tiene como consecuencia directa menos contribuyentes para sostener el sistema.
Coyuntura económica
La noticia de la pérdida constante de población llega en uno de los momentos más delicados para la economía local y a solo días del 1 de enero, cuando se cumplen vencimientos de deuda por valor de más de 900 millones de dólares.
El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, reconoció el martes que esos vencimientos no se podrán pagar en su totalidad y que lo que se analiza ahora es cuáles se podrán atender.
“Hacer un pago total yo creo que va a ser poco menos que imposible”, dijo el jefe del Ejecutivo, quien advirtió a quienes señalan que la crisis no es tan profunda como asegura el Gobierno.
El secretario de Hacienda de Puerto Rico, César Miranda, señaló sobre el previsible impago y las consecuentes demandas de los acreedores que el Gobierno está preparado para lo que pueda pasar.
El Ejecutivo teme que las demandas judiciales no solo lleguen de los poseedores de bonos de deuda de Puerto Rico y sus corporaciones públicas, sino también de proveedores del Gobierno, a los que se debe cerca de 300 millones de dólares, según información oficial.
La falta de liquidez del Gobierno provocó el retraso en el abono a los funcionarios de la paga extraordinaria de Navidad, lo que al final también ha repercutido en la economía de la isla caribeña.
El presidente del Centro Unido de Detallistas -la patronal del pequeño comercio-, Rubén Piñero, dijo esta semana que el retraso en el abono de la paga navideña provocó que cerca de 130 millones de dólares dejarán de entrar en la economía local.
La deuda a pagar por el Gobierno de Puerto Rico durante el presente año fiscal, que finaliza el próximo 30 de junio, es de cerca de 5.000 millones de dólares.