Tomado de Yahoo Noticias
3 de noviembre de 2016.- Hay veces que con muy poco se pueden conseguir grandes cosas. Bien lo sabe Maanasa Mendu, una adolescente de 13 años que gracias a una brillante idea puede cambiar la vida de millones de personas en el mundo que viven en la más absoluta oscuridad. ¿Cómo? Produciendo energías renovables como la solar y la eólica a un precio muy bajo: 5 dólares (unos 4,5 euros aproximadamente).
El aparato se llama Harvest (cosecha) y funciona con una especie de hojas solares que captan la energía vibracional que está presente en nuestro entorno –del sol, del viento, de las precipitaciones- y la convierten en renovable gracias a un material piezoeléctrico que va conectado al dispositivo, tal y como cuenta BBC.
Pese a que el primer prototipo es aún bastante rudimentario, lo cierto es que se ha revelado como muy eficaz y puede ayudar mucho en las regiones del mundo con menos recursos.
La joven científica tuvo la idea en su último viaje a India, mientras que visitaba a su familia. Había apagones muy frecuentes, que dejaban temporalmente a las comunidades sin electricidad y sin aire acondicionado, por lo que vio que era necesario desarrollar algún tipo de dispositivo barato que ayudara a generar electricidad haciendo uso de las energías que nos rodean.
En un primer momento ella simplemente quería dedicarse a la eólica, pero su mentora y gran valedora del proyecto, Margaux Mitera, la convenció de que podía aprovechar también otras.
“Para más de un quinto de la población mundial la oscuridad es una realidad permanente. Quería desarrollar un sistema de iluminación que pusiera fin a ese problema”, relata la adolescente en una entrevista.
Maanasa recibe el premio.
El prototipo ha sido un auténtico éxito y le ha valido el reconocimiento del concurso de jóvenes talentos científicos de Estados Unidos Discovery Education 3M Young Scientist Challenge, que le ha otorgado el primer premio, valorado en 25.000 dólares (unos 20.000 euros).
Ahora Maanasa quiere construir otro prototipo, más elaborado, que pueda llegar a comercializarse en el futuro. Un proyecto ambicioso que sin embargo ya ha conseguido lo más difícil: una idea que puede cambiar las cosas para muchas personas en el mundo.