Apple ha sido una de las empresas que han cuestionado la política migratoria del Presidente de EEUU.
Por: RTVE.
EE.UU, enero 31, 2017.- Los máximos directivos de importantes empresas de Estados Unidos como Apple, Google, Twitter, Goldman Sachs, Ford y Starbucks, entre otras, han criticado este lunes duramente la orden ejecutiva de Donald Trump contra la entrada de ciudadanos de siete países de mayoría musulmana -Irak, Irán, Siria, Yemen, Libia, Somalia y Sudán- y de refugiados. Una política que ha provocado la caída de Wall Street, cuyo principal indicador, el Dow Jones, ha perdido los 20.000 puntos.
Microsoft ha comunicado, de hecho, que está cooperando con la Oficina del Fiscal General del Estado de Washington, que ha demandado a Trump por el veto migratorio. La compañía ha asegurado que está proporcionando información sobre el impacto de la orden y ha señalado que estarían encantados de testificar si fuera necesario.
Los críticas más duras han provenido de las empresas tecnológicas de Silicon Valley. “Apple no existiría sin la inmigración”, ha asegurado Tim Cook, máximo responsable de la firma con la mayor capitalización bursátil de Estados Unidos, que hace pocas semanas se reunió en Nueva York con Trump.
En términos parecidos se ha expresado el director general de la firma Google, Sundar Pichai, quien ha recordado que “durante generaciones este país ha sido el hogar de inmigrantes” como uno de sus empleados afectados por la medida.
Twitter ha escrito en esta conocida red social un mensaje desde su cuenta oficial para subrayar que su compañía está construida por “inmigrantes de todas las religiones” y subrayar que les apoyarán y estarán a su lado “siempre”.
El CEO de Airbnb, Brian Chesky, también criticó la medida de Trump en su cuenta de Twitter este fin de semana y en las últimas horas ha lanzado una iniciativa para acoger gratuitamente alojamiento para refugiados y otras personas vetadas en Estados Unidos.
Trump anunció el viernes esta orden sobre inmigración amparándose en la necesidad de proteger al país del posible ingreso de terroristas.
La medida generó un caos en los aeropuertos del país y protestas públicas en muchas ciudades de parte de manifestantes que piensan que la decisión está en contra de la tradición estadounidense de acoger a refugiados y ciudadanos de otros países.
Goldman Sachs, también en contra del veto migratorio
“No es una política que apoyemos”, ha afirmado Lloyd Blankfein, director general de Goldman Sachs, líder mundial de banca de inversión, en un mensaje enviado a sus empleados el domingo por la noche y que estaba teniendo este lunes gran eco en los medios financieros.
“Para que seamos exitosos, nuestros hombres y mujeres deben reflejar la diversidad de las comunidades y de las culturas en las que operamos”, ha afirmado el CEO de Goldman Sachs al citar uno de los principios que ha venido defendiendo tradicionalmente su firma.
“Eso significa que debemos atraer, retener y motivar a personas de muchos orígenes y perspectivas. Mantener la diversidad no es una opción, es lo que debemos ser”, ha agregado el banquero estadounidense citando esos fundamentos.
Ford: “No apoyamos esta decisión”
Una posición parecida ha reflejado el grupo Ford, la mayor firma del sector automotor en Estados Unidos, que ha destacado la “rica diversidad” que viene defendiendo esa firma dentro y fuera del país y “el respeto para todas las personas”.
“Por esa razón no apoyamos esta decisión o cualquier otra que está en contra de los valores que mantiene la compañía”, sostiene un mensaje dado a conocer por el director general de Ford, Mark Fields, y el presidente ejecutivo, Bill Ford.
La cadena de cafeterías Starbucks no solo expresó su oposición a la orden ejecutiva de Trump, sino que también ha anunciado su intención de contratar en los próximos cinco años a unos 10.000 refugiados en los 75 países donde opera.
“Vivimos tiempos sin precedentes en los que se está poniendo en duda el sueño americano que nos obliga a posicionarnos y a no permanecer callados ante la incertidumbre que despiertan las medidas de la nueva administración”, ha afirmado el CEO de Starbucks, Howard Schultz.