Los isleños habían conseguido ese estatus tras el terrible sismo de 2010, que destrozó gran parte de la isla
De la Agencia AP
WASHINGTON, 22 de Nov. 2017/- .– En consonancia con su fuerte promesa de campaña de terminar con el ingreso y las facilidades a extranjeros para que se queden en el país, el presidente Donald Trump, pondrá fin a un programa de residencia temporal que permitió que casi 60.000 haitianos vivan y trabajen en EEUU desde que un poderoso terremoto sacudió el país caribeño en 2010.
Con el objetivo de afianzar su lema «Estados Unidos primero», y ante los reclamos de un sector de la población que asegura que hay menos puestos de trabajo debido a la alta cantidad de extranjeros, el Departamento de Seguridad Nacional indicó que las condiciones de vida en Haití mejoraron significativamente por lo que es tiempo para los haitianos de volver a casa.
El beneficio consolidado tras el devastador sismo de 7 grados en la escala de Richter de 2010 será extendido por última vez hasta julio de 2019.
Activistas y legisladores de ambos partidos le habían pedido al gobierno de Trump que extendiera 18 meses el programa, conocido como Estatus de Protección Temporal. El gobierno del presidente haitiano Jovenel Moise también solicitó una ampliación.
Sin embargo, las voces detractoras no se quedaron calladas y afirman que las condiciones en el país isleño no están lo suficientemente bien como para que estos miles de personas sean deportados.
Pese a que Haití consiguió avances gracias a la asistencia internacional, la nación caribeña sigue siendo una de las más pobres del mundo. Un 59 por ciento de la población de Haití vive debajo de la línea de la pobreza de 2,41 dólares diarios, según el Banco Mundial.
El Departamento de Seguridad Nacional hizo su anuncio 60 días antes de que expirara la residencia temporal para los haitianos. En mayo, la agencia amplió el beneficio por sólo seis meses en lugar de los 18 de costumbre y solicitó a los haitianos amparados por el programa que arreglen sus cosas y se preparen para regresar a su país.
El estatus de residencia temporal beneficia a unas 435.000 personas de nueve países devastados por desastres naturales o la guerra que llegaron en forma legal o no a Estados Unidos.
Desde que asumió la presidencia, Trump ya canceló los programas de permisos temporales para inmigrantes de Sudán y Nicaragua . El mandatario pospuso hasta julio próximo una decisión sobre un programa similar para 86.000 residentes de Honduras . Agencia AP