Estudiantes piden ayuda para que su voz llegue lo más alto posible
Los estudiantes de medicina que terminan después de vencerse el plazo, la universidad no tiene forma de admitirlos. Se da la situación de que hay muchos graduandos que vienen, terminan sus carreras y se quieren graduar ayer, entonces, la UASD es la única institución del mundo donde las personas no quieren respetar la planificación, se entiende que siempre hay una prórroga, por eso han tenido que programar 21 investiduras por año. “No es verdad esa parte, porque nosotros les damos preferencia a los que se van a graduar. A ellos hay que darles un récord de notas que se lo exige la facultad o la escuela y se lo preparamos, les damos prioridad”, asegura Agüero.
SANTO DOMINGO, 2-abril-2017.- . Conseguir un récord de notas, una certificación de título, una carta para anillo, el exequátur u otro papel oficial es difícil para los estudiantes y egresados de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
A procesos que en otras universidades tardan cinco días laborables, la academia estatal les pone fecha de entrega de un mes. Vencido el período de espera el solicitante pasa a retirar el documento, pero no está listo, y en eso tardan entre dos y tres meses para recibirlo.
Hasta el pasado lunes, los empleados de la Dirección de Registro estaban trabajando con las solicitudes del pasado mes de enero.
A esa demora se le suma la precariedad con que los empleados realizan sus labores, lo que muchas veces redunda en maltrato a los usuarios que demandan algún tipo de información.
El área está sometida a un proceso de remodelación que, según el director de Registro, Roberto Agüero, es para mejorar los servicios.
Agüero reconoce los inconvenientes aunque dijo desconocer las tardanzas para la entrega de documentos, pues asegura que un servicio no puede durar dos meses y promete corregirla.
Cuando una persona necesita un documento urgente, porque logró una beca para cursar una especialidad en el extranjero y así lo hace saber, se le entrega el documento hasta en una hora, siempre que esté el personal y el equipo técnico disponible
“Registro es el auditor académico de la universidad, pero también la esperanza, la oportunidad y todo los días venimos dispuestos a ayudar”, expresó Agüero.
No cree que haya una persona que diga que “se la ponen difícil”, por el contrario, dijo que encontraron muchas confusiones de personas buscando informaciones que no corresponden a Registro, sino a su escuela académica.
“Soy estudiante de Medicina de la UASD, una vez más me hago eco del pesar que estamos pasando los estudiantes y profesionales egresados de la UASD con el departamento de Registro de esta institución, que está jugando con el tiempo, dinero, esperanzas y hasta la dignidad de las personas que solicitan su servicio”, dijo Adrián Cuevas.
El tráfico de influencias también es visible en Registro, allí quienes tienen algún conocido reciben sus documentos en tiempo récord, según personas que hablaron con DL pero quieren reserva de sus nombres.
Pero la gran mayoría de usuarios -según sus alegatos- debe soportar el mal humor de los empleados, que en ocasiones les hablan mal, lo cual provoca discusiones.
“El trato que uno recibe de esos individuos es el mismo que recibe un perro callejero que se acerca a las puertas de una casa. No hay ni saludos, ni cordialidad, ni siquiera vocación de servicio por parte de esas personas”, dice Cuevas.
El lío de Medicina
Otros que la pasan mal son los estudiantes de la escuela de Medicina, pues muchos deben esperar varios meses para graduarse, después que se examinan de sus tesis de grado, para que Registro les asiente y certifique sus calificaciones, necesarias para investirse.
Sobre el particular, Gloria Domínguez, encargada de investidura, atribuye el inconveniente a la escuela que envía con retraso las notas.
Sobre el particular, el director de Registro, Roberto Agüero, reconoce que los estudiantes que tienen más inconvenientes son los de medicina y por eso han hecho alianzas estratégicas con la facultad.
“Lo que pasa es que ellos tienen un protocolo, cuando terminan sus internados. Esas evaluaciones y el proceso que duran y la cantidad de tesis que tienen que mandar en la programación que tiene la universidad, a veces no terminan en el tiempo que tiene que hacerse”.
Los estudiantes de medicina que terminan después de vencerse el plazo, la universidad no tiene forma de admitirlos. Se da la situación de que hay muchos graduandos que vienen, terminan sus carreras y se quieren graduar ayer, entonces, la UASD es la única institución del mundo donde las personas no quieren respetar la planificación, se entiende que siempre hay una prórroga, por eso han tenido que programar 21 investiduras por año. “No es verdad esa parte, porque nosotros les damos preferencia a los que se van a graduar. A ellos hay que darles un récord de notas que se lo exige la facultad o la escuela y se lo preparamos, les damos prioridad”, asegura Agüero.