SAN PEDRO DE MACORIS, 17-agosto-2018.- En un nutrido acto efectuado en la Plaza de los Restauradores, con la presencia de estudiantes, maestros y autoridades, fue conmemorado el 155 aniversario de la gesta de la Restauración de la Republica en 1863.
La Gobernación, Ayuntamiento, Regional 05 de Educación, Junta de Vecino Salud y Vida, Club San Pedro de Macorís y el Club de Leones, depositaron ofrendas florales ante el busto del general Gregorio Luperón.
El director de la Regional 05 de Educación Bolívar Sosa Soriano al pronunciar el discurso central, dijo que este es el momento de saber cuántos dominicanos se comportan como Pedro Santana, lleno de ambición, de gran apetito de los beneficios del poder, servicio flaco y vergonzoso a la patria, amante de lo extranjero y poco aprecio por lo nuestro.
El funcionario educativo, indicó que también es buena saber quiénes se comportan como el general Gregorio Luperón, hombre de valor, que con otros valientes dominicanos, nos dejan la enseñanza para ser mejores ciudadanos.
Exhortó a asumir la tarea de cambiar esta sociedad, hacer de la Republica Dominicana, un país más vivible, más seguro, más limpio, más organizado, pero que para lograr esto, es necesario que cada persona sea dueña de sus actos y lleve la frente el alto, cultivar su valor de compromiso y responsabilidad.
GOBERNADOR
El gobernador civil Luis Miguel Piccirillo, dijo que todos tenemos el compromiso de inculcar y arraigar el sentimiento patrio en los corazones de nuestros niños y jóvenes.
Entiende que además se le debe enseñar los principios cívicos que norman el debido respeto de la convivencia ciudadana, la cual debe expresarse en el respeto a las normas y leyes de nuestra sociedad.
Consideró que estamos perdiendo la lucha, la más importante de todas, que es la de formar a nuestros niños y jóvenes, en valores y principios que les permita poder convivir y preservar el patrimonio de nuestra nación.
Entiende que son las autoridades, maestros, padres y líderes, los responsables de arraigar en nuestros jóvenes y en esta generación emergente, esos principios y valores, para que en el mañana podamos disfrutar y exhibir una mejor sociedad.
Entre los presentes están, la vicealcaldesa Nelly Pilier quien dio las palabras de bienvenida, los directores de los distritos 01 y 02 Carlos Manuel Zorrilla y Yelki Catedral Febles, respectivamente.
Además Juan Eric Yérmenos del Ministerio de Deportes, Raúl Custodio del CEA, Ruperto Payano presidente de la ADP, Abrahán Ortiz Cotes, Procurador de Corte, doctora Delka Reyes, directora Regional de Salud y Octavio Álvarez, presidente de la junta de vecinos Salud y Vida.
APUNTES HISTORICOS: «Gregorio Luperón fue calificado siempre como hombre de un ‘valor fabuloso’, pues se distinguió enseguida entre sus compañeros por su ejemplar patriotismo y combatividad e iniciativa en la acción. Sus méritos fueron reconocidos por el Gobierno de Santiago, que le designó jefe superior de Operaciones en la provincia de Santo Domingo. Su misión era enfrentar al ejército español, comandado por Pedro Santana».
«Pudo demostrar sus grandes dotes de guerrero en la campaña que llevó a cabo contra el poderoso y disciplinado ejército extranjero. Con una cantidad inferior de hombres, armas y medios, supo desarrollar una guerra de guerrillas que debilitó la poderosa fuerza española. Pero su forma independiente de conducir la guerra no fue bien vista por sus superiores y, por tanto, fue relevado del mando. En Santiago, sin embargo, aceptó el cargo de vicepresidente de la Junta Gubernativa».
«Cuando vio la República restaurada, regresó a su pueblo natal, Puerto Plata, rodeado de la admiración y el cariño de todos los dominicanos, que reconocieron en él al más firme paladín de los ideales patrios. Ahora bienÖ ¿quién fue el hombre detrás del héroe restaurador?»
LUPERÓN: LA VIDA DEL PRÓCER RESTAURADOR
?En su autobiografía, Gregorio Luperón recuerda, con gratitud en el corazón, esas horas de lectura que, durante sus primeros años juveniles, pasaba entusiastamente en una biblioteca privada. La envergadura de sus deberes y los libros predilectos forjaron más temprano aún, precozmente, su carácter. Imperceptiblemente se preparaba en aquel recinto una de las figuras más egregias de nuestra historia, la primera espada de la Restauración».