La Asociación de Escritores y Periodistas Dominicanos (ASEPED), conmemoran el 20 de febrero, “Día Mundial de la Justicia Social”.
Santo Domingo,.- 19.-febrero.- 2019.- La ASEPE recuerda que es el Estado, el responsable de garantizar que el desarrollo económico, político y social llegue a todos, desde la perspectiva de la sostenibilidad y la equidad, que es el eje que marca a las Naciones Unidas, con objetivo fundamental de que el Día Internacional de la Justicia Social, es una forma de reflexionar sobre la necesidad de proteger a los más necesidades
La justicia social ofrece a cada hombre y a cada mujer en el mundo del trabajo la posibilidad de reivindicar libremente y en igualdad de oportunidades su justa participación en las riquezas que han contribuido a crear, es la mejor forma para llegar al Bien Común.
Para enfrentar los males que han producido la crisis general, tanto económica, política y social, deben ser enfrentados con la justicia social, para buscar el bien común.
Todo ser humano, tiene necesidades fundamentales en común, por ejemplo: vivir, comer, salud, trabajo, tener una casa donde vivir, tener acceso a los centros sanitarios, tener identidad y educación, servicios básicos (agua, electricidad, etc.) y poder expresarse libremente.
Por el simple hecho de ser persona, cada individuo tiene derecho a ver sus necesidades satisfechas de la manera más apropiada a su propio desarrollo.
Cuando estas necesidades fundamentales no se satisfacen, tenemos que enfrentarnos a la injusticia. ¡En el mundo de hoy los pobres muchas injusticias!.
La ASEPED expresa que la pobreza es la injusticia más fundamental y más extendida: no permite el acceso a otras necesidades fundamentales, como un nivel de vida razonable, una alimentación sana, asistencia médica, un medio ambiente limpio y un empleo justo.
Paralelamente, esta discriminación interfiere tanto con las posibilidades que tienen los individuos de desarrollar su potencial por completo, como con las discriminaciones basadas en la raza, el sexo, clase social, la religión, el idioma, la nacionalidad o la aptitud física.
Por consiguiente, la justicia es imprescindible para el desarrollo tanto de los individuos como de las comunidades y de los países.
La sociedad debe asegurar la justicia social procurando las condiciones que permitan a las asociaciones y a los individuos obtener lo que les es debido.
El respeto de la persona humana considera al prójimo como ‘otro yo’, supone el respeto de los derechos fundamentales que se derivan de la dignidad intrínseca de la persona. La igualdad entre los hombres se vincula a la dignidad de la persona y a los derechos que de ésta se derivan.
Los escritores y periodistas recuerdan que la igual dignidad de las personas humanas exige el esfuerzo para reducir las excesivas desigualdades sociales y económicas. Impulsa a la desaparición de las situaciones inicuas, que padecen los sectores más vulnerables, como son las mujeres, los niños, los campesinos, los adultos mayores y los desempleados.
Muchos periodistas y escritores sufren en carne propia las desigualdades y la falta de protección social.
La solidaridad es una virtud eminentemente cristiana. Debemos tener convicciones y criterios sobre la justicia social, como un medio para llegar al Bien Común, el bienestar de la mayoría del pueblo, que es una de la misiones de los humanistas.
José Gómez Cerda
Presidente de la Asociación de Escritores y Periodistas Dominicanos-ASEPED