El pastor, su esposa y su hija fallecieron en un accidente aéreo en Las Bahamas.
San Juan, 10 nov (EFE).– La trágica muerte del reconocido pastor evangélico Myles Munroe mantiene conmocionada a la comunidad evangélica luego de que se diera a conocer que el religioso fue una de las víctimas del accidente de una avioneta, ocurrido ayer cuando intentaba aterrizar en un aeropuerto de Las Bahamas.
Myles Munroe, el pastor que murió cumpliendo su propósito de predicar el evangelio
Entre los nueve fallecidos en el accidente aéreo ocurrido esta madrugada en Bahamas se encontraba el reconocido líder religioso Myles Munroe, propietario de la avioneta siniestrada y quien viajaba junto a su esposa y otros feligreses para participar de una conferencia religiosa.
«Es imposible expresar cuán grande ha sido la pérdida de Munroe para Bahamas y para el mundo. Sin duda, era una de las figuras religiosas más reconocidas a nivel mundial que nuestra patria ha producido», dijo Perry Christie, primer ministro de Bahamas, en un comunicado.
El pastor Myles Munroe, de 60 años, era el presidente y fundador de la Bahamas Faith Ministries International, además de ser un reconocido conferencista que impartía charlas motivacionales y sobre liderazgo alrededor del mundo.
Munroe era líder del Ministerio Internacional de Fe en Bahamas y gozaba de reconocimiento internacional por su trabajo como autor y mentor de grupos de corporaciones e individuos.
En la avioneta viajaban nueve pasajeros, Monroe, su esposa Ruth, el pastor Richard Pinder y otras seis personas, según detalla un comunicado del Gobierno de Bahamas, que confirmó hoy que la aeronave «fue destruida y no hubo ningún sobreviviente».
El líder cristiano fue en 1998 la persona más joven en su país en recibir la Orden de Imperio Británico otorgada por la reina Isabel II en el marco de su cumpleaños.
Además, el Gobierno de Bahamas lo reconoció con el Premio de Plata del Jubileo por «proveer 25 años de servicio a Bahamas en la categoría de desarrollo espiritual, social y religioso».
Las autoridades investigan si las intensas precipitaciones que habían obligado a otros vuelos a desviarse de la zona fueron las causantes del siniestro. De hecho, el domingo dos vuelos regulares locales de Bahamasair abortaron su aterrizaje en Gran Bahama por el mismo motivo. EFE