Foto. Restaurante Sava. Foto de Facebook
Escrito por: Benito Kozman,Yahoo Noticias
Sábado 26 de mayo 2017.- Eran las 11 y media de la mañana, y un grupo de agentes de la ley entraron al popular restaurante Sava’s, de Ann Harbor. Ninguno de los empleados reparó en ellos. Ordenaron waffles con tocino y huevo con tostadas y comieron a sus anchas.
Entonces un par de ellos se dirigió a la cocina, donde se encontraron con el cocinero Carlos Rivera-Ochoa, quien salía a botar la basura. Le preguntaron por una persona que estaban buscando y el hombre, quien no habla muy bien inglés, les dijo que no lo conocía.
Aparentemente fue en ese momento que Rivera supo quiénes lo habían interpelado: agentes del servicio de Inmigración y Aduanas, ICE.
Sin que mediaran muchas palabras, Rivera fue esposado. Su esposa, Nikki Sánchez, empleada del lugar, acudió y él logró mostrar su tarjeta de residente, que siempre lleva consigo desde que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos.
“No sólo es ofensivo, sino que fue avergonzado frente a todo el restaurante, ¿por qué no le preguntaron antes por sus papeles?”, dijo indignada Sánchez al sitio MLive.
Rivera fue liberado, pero otros tres cocineros que presenciaron el incidente se asustaron y salieron corriendo por la puerta principal para luego ser arrestados.
Sava Lelcaj, propietaria del popular restaurante, dijo que su compañía, Savco Hospitality, pasa por un proceso de investigación para asegurarse de que los empleados potenciales tengan la documentación adecuada para trabajar en los Estados Unidos. Ella no estaba en el restaurante cuando los agentes de ICE detuvieron a los empleados.
Rachael Yong Yow, portavoz de ICE, aseguró que dos de los hombres habían entrado ilegalmente en el país, y el tercero había permanecido después de expirada su visa.
Pero Bree Stilwell, director de mercadeo de Savco Hospitality, dijo que todos los empleados de Sava están documentados, incluidos los 3 detenidos.
“Todos estos trabajadores estaban en pleno cumplimiento. Tenían documentación actualizada de I-9, así como todos los papeleos de nueva contratación que cualquier empleado de Savco completa para trabajar con nosotros”, afirmó.
Los tres empleados detenidos fueron liberados posteriormente de modo condicional.
La propietaria del restaurante, Sava Lelcaj, huyó del régimen comunista de Albania en la década de 1980 con su familia y vivió en un campamento de refugiados serbios antes de radicarse en Nueva York.
“Estados Unidos nos aceptó y nos permitió venir aquí y tener una vida mejor”, dijo. “Si puedo hacer cualquier cosa para hacer que el sueño de cualquier persona se haga realidad, lo haré”.